lunes, mayo 16, 2011

LA TAL PEKITAS

Si Alejandra fuera un personaje de ficción, probablemente sería Tarzán... sí, ya sé que Tarzán es hombre, pero la verdad es que no puedo pensar en otro que sea mujer y que tenga el don, o el simple poder, de comunicarse con los animales. La verdad dudo mucho que Alejandra lo pueda hacer... pero no me cabe ni la menor duda que seguramente sería algo que le gustaría.

Conocí a Alejandra a través de Karelia... seguido la escuchaba hablar de ella: que si Ale pequitas esto, que si Ale pequitas aquello y bla, bla, bla.

La imaginaba chaparrita, gordita y blanca, pero nunca se me ocurrió pensar en el tono de su voz o si realmente estaría llena de pecas para que su adjetivo fuera "pequitas"... no, nunca hice esa conexión.

Cuando la conocí me di cuenta de que no era gordita... su estatura es... bueno, es difícil saberlo cuando estoy acostumbrada a que la mayoría de la gente sea bajita... supongo que es normal. Sólo atiné en la idea de que era blanca.

Al principio, como suele ocurrirme, decidí medir mi confianza... en estos días una nunca sabe cómo es realmente a gente que conoce por a'i. Poco a poco, como suele ocurrir, comencé a conocerla a profundidad, aunque de entrada apenas conviví con ella 11 días, después se fue de vacaciones ocho días y a su regreso... ya no me acuerdo qué, ni cómo, ni cuándo.

El caso es que Alejandra es una muchacha rara... sí, parece que es mi palabra favorita para describir a la gente, aunque en el caso de Ale pekitas hay varias diferencias.

Es difícil pensar que tenga el potencial (que en realidad posee) para mentar madres por doquier... es como un ser amargosito en un momento y segundos después se convierte en un pedacito de miel y dulzura. Por eso me cae bien, porque su humor vuela de un lado a otro, porque a veces es incomprensible, porque debajo de esa dureza hay un ser con mucha luz. No sé realmente si ella esté consciente de esto.

Para conocerla bien, hay que quitarle los tres millones de capas que tiene encima... me recuerda a Shrek y el asunto este de la cebolla.

Como suele suceder con la gente que uno conoce en los trabajos, creo que difícilmente podríamos ser amigas si nos hubiésemos conocido de otra forma: a ella le gustan las flores en la ropa y a mí no; ella ama Venezuela, y yo simplemente me acuerdo de Los chamos; a ella le gustan los colores claros y a mí esos me provocan repulsión; ella tiene entre sus gustos musicales (según Facebook) cosas horribles como Alejandro Fernández, Juanes y Camila, a mí todo eso me provoca un gran GUIU; a ella le gusta Harry Potter y a mí sólo me queda respetarla por eso; aunque bueno, tal vez podríamos ir al cine juntas o sentarnos a ver la tv con una bolsa de papitas o un brownie.

Mmmm... quién sabe... creo que aún hay mucho por conocer de esta Ale pekitas que ayer celebró su cumpleaños. Japi berdei tu llu!!!





lunes, mayo 09, 2011

LA REVOLUCIÓN

He aquí los pasos a seguir...

kill your television
steal the satellites
download all the codes
catch the public eye

shout your manifesto
bring your megaphone
stay below the radar
join the underground

I want to car, skid and crash into the brave new world
I want to ride

we want revolution
constant evolution
start your engines blow your fuses
burn the bridges for the future
this is our solution

time for retribution
bring your target down
beat the jungle drums
flaunt your decadence

Underground Resistance
keeps you entertained
feed your hungry mind
shape the things to come

I want to car, skid and crash into the brave new world!


miércoles, mayo 04, 2011

GNÓRMICA


Cuando conocí a Norma y me dijeron que su correo electrónico era "gnomita", inmediatamente me vino a la mente la película Monstruos contra aliens, y es que ahí sale Susan, una mujer que -en el día de su boda con un imbécil- es golpeada por un meteorito que la hace crecer y crecer y crecer, hasta convertirla en un monstruo. Entonces, como ya no es una persona común y corriente, la encierran en un complejo secreto donde hay otros monstruos como ella. Su nueva condición le da el nombre de "Gnórmica".

El asunto es que pensé que "gnomita" tenía algo que ver con ese ser monstruoso, pero parece que no... de hecho, todavía no tengo ni la más remota idea de qué significa ese "gnomita"; sin embargo, no puedo evitar pensar en "Gnórmica" cuando la veo.

Norma me recuerda un poco a mí cuando empecé a trabajar en el periódico, probablemente es porque cuando ella fue contratada tenía casi la misma edad que yo tenía cuando encontré mi primera chamba... A esas edades de la vida uno está muy emocionado y con muchas ganas de hacer miles y millones de cosas... después uno se empieza a dar cuenta de que no es tan fácil y que el trabajo apenas podrá tocar a unos cuantos lectores, que se olvidarán de lo que han leído en menos de lo que canta un gallo. No quiere decir eso que este trabajo no sea lo máximo... lo es, y seguramente no hay nada mejor que esto.

Cuando recién la conocí, me pareció que era medio rarilla... no me equivoqué. Incluso dice que en su casa también la consideran un poco rara.

A mi me parece una muchachilla linda... "buena persona", como diría Mayra (de quien después hablaré un poco). Tiene buenos sentimientos, se enoja como gente grande -y a veces de situaciones que me parecen inútiles- y llora de vez en cuando.

Sí... se parece a mí y eso, evidentemente, hace que me caiga requete bien. Probablemente es porque, además de la coincidencia laboral, es una linda canceriana como yo.

Ahora que la conozco un poco más, me parece una muchachita lista que todavía tiene un largo camino por andar, le falta aprender muchas cosas, pero sabe de muchas otras de las cuales yo no tengo ni la más pacheca idea.

Cada vez que alguien cuenta algo que le pasó, Norma tiene una anécdota para contar: "lo mismo le pasó a fulanito, por eso tú debes hacer tal cosa y ya verás... no se puede hacer wara-wara por esto y por aquello... deberías de ponerte aquello para que ya no esto..." y cosas así.

Me da risa a veces... pero me la guardo, no se vaya a ser que está en esos días en que le dan ganas de llorar... es chistosa Normita.

Lo que más me gusta de su personalidad es que siempre tiene un chiste (tonto, la mayoría de las veces) que me hace reír y reír.

Lo único malo es que le gustan cosas medio raras, como el tal "Palomeras" o cómo se llame... ¡pobre! ...no sabe que está equivocada... jajaja... algún día lo entenderá.

En fin... felicidades a Genórmica, porque ya terminó la escuela. (fanfarrias)


viernes, agosto 06, 2010

¿POR QUÉ LA VIDA ES TAN INJUSTA?

No lo entiendo... de verdad que no.
No comprendo por qué se le da más peso siempre a los protagonistas, cuando los antagonistas hacen también su chamba y, de hecho, si no la hicieran, los protagonistas no tendrían absolutamente ninguna razón por la cual existir.
Por eso me molesta en demasía que no existan, por ejemplo, barbies de las brujas y reinas malas de los cuentos. ¡¡¡Es una grosería!!! Estas mujeres malas también se han esforzado porque las otras ñoñas luzcan en pantalla, y en las loncheras de las niñas y en los vestidos, los disfraces, los lápices, los borradores, los zapatos y cuanto producto se le ocurra a Disney comercializar.
¿Acaso los niños y niñas que admiran a los antagonistas no tienen derecho a ser fanáticos? ¿Por qué coartan nuestra libertad de admiración de esta forma?
¡Es una grandísima mama...rrachada! ...y la peor injusticia del universo.
No se vale... claro que no.
Sólo por eso, rindo honores a Maléfica... la mujer guapa y sexy de La bella durmiente.
Éstas sí son mujeres... no ñoñadas.




miércoles, agosto 04, 2010

ARCHIVO INEXISTENTE

Hace nueve años, más o menos, Mariana entrevistó a Lety Bouchet, una mujer que en esta ciudad se ha hecho popular por ser probablemente una de las mejores en su trabajo: la lectura de manos.
Yo no creía en esas cosas, pero la verdad es que me daba bastante curiosidad asistir a una sesión con ella, pues Mariana llegó casi maravillada por el diálogo que tuvo con aquella mujer. La consulta no era barata, pero como en ese tiempo me iba bien económicamente, me daba lo mismo si el ir con ella representaba tirar el dinero a la basura.
Por supuesto que Mariana y Liliana también estaban super apuntadas para ver qué nos podía decir Lety. Al final, sólo Liliana y yo acudimos a nuestras citas con grabadora en mano, pues nos había dicho ya nuestra amiga que había posibilidad de grabar la sesión.
Debo decir que Lety se robó mi atención desde el primer momento, pues no es la típica "adivina" que te echa un rollo de que encontrarás al amor de tu vida o de que tu pareja te es infiel con una chica castaña a la que ve todos los días en su trabajo. No, nada de eso.
Lo primero que ella hizo fue llevarme hacia mi pasado y me contó cosas que sucedieron cuando yo estaba dentro de la matriz de mi madre, obviamente está cañón que yo me acuerde de eso y constate que lo que alguien dice es verdad o no; pero yo sabía en ese caso que lo que me decía Lety efectivamente había sucedido, pues mi mamá en ocasión varia llegó a contarme cómo estaba ella cuando ya me traía dentro. Por eso, casi me caigo en pedacitos al escucharla narrar los primeros meses de mi existencia.
De mis años mozos, siendo una niña, me contó poco; dijo que había fragmentos de mi historia que habían sido borrados y entonces me preguntó qué recordaba de cuando tenía equis edad. No lo recordé y todavía hoy hay muchos fragmentos de mi vida que no encuentro por ningún recoveco de mi mente.
Justo hace unos días apareció en mi vida, a través del Fesibuk precisamente -eso sí me gusta del feis-, un amigo que dejé en el olvido hace dos décadas. Tengo recuerdos vagos de él, algunos de los cuales prefiero guardármelos, porque es increíble la cantidad de idioteces que una puede hacer cuando es más joven.
Pero hay otros, de una mejor época -creo-, que no he podido encontrar por ningún lado. Supongo que cuando cambié los archiveros de mi mente por el disco duro que hoy poseo, algo se quemó por ahí, así que entre los documentos viejos de mi memoria apenas puedo hilar una historia decente.
Qué pena... me gustaría acordarme. Recuerdo, eso sí, que paseábamos de vez en cuando en la moto Aero 50, de Honda, que me regalaron mis papás cuando cumplí 15 años; pero no tengo ni la más pacheca idea de cómo sucedió eso. ¡Qué raro!
En fin... a ver si me la refrescan... la memoria, claro.


* La foto es de aquél trágico incendio de la Biblioteca Anna Amalia de Weimar, en Alemania, en septiembre de 2009. Se perdieron cinco mil libros históricos... un hecho bastante trágico, debo decir.

martes, julio 27, 2010

ME GUSTA, NO ME GUSTA

Me gusta el Feisbuk. Sí.
No me gusta que haya quienes se tiren unos super mega dramas ahí. No.
Me gusta el chisme. Sí.
No me gustan todas las historias que se cuentan ahí. No.
...hay demasiado drama a veces...

La verdad es que por más que trato de entender cuál es el verdadero sentido del Feisbuk, el asunto no me queda del todo claro.
¿Será que estamos tan solos que buscamos la forma de hacernos presentes ante los otros?
...o quizá simplemente es un asunto de protagonismo, de mostrar que nos va super cool, que tenemos hartos amigos y que nos pasan unas cosas mega interesantes, mientras que algunos perdedores se han quedado en la sombra.



* En la foto. Me gusta la catarina. No me gusta la flor.

lunes, julio 19, 2010

I'M BACK

Sí, sí, sí... la imagen nada tiene qué ver con el título de este post, pero el asunto es que estoy de vuelta en muchos sentidos y uno de ellos es que mis bonitas imágenes han vuelto también.
Justo hace un año publiqué mi última entrada... rompí con el yugo que me abrumaba y comencé a surcar otros mares.
Al paso de una docena de meses, echo un vistazo a la que fui y reconozco a la que hoy soy, la misma, pero recuperada y con nuevos bríos; con ganas de hacer cosas (otras), con la intención de no volver a tropezar como antes lo hice.
No puedo decir que las heridas han sanado, pues todavía hay en mi corazón rencor... las vísceras también tienen memoria; mi pensamiento aún ladra cuando recuerdo aquella miserable bastardita... jajaja... también me da risa.
En fin... que han pasado hartas cosas en este año, muchos cambios e historias... y hoy me veo de nueva cuenta en el sitio que abandoné hace poco más de un año, el 1 de julio de 2009 para ser precisos, con otras cosas por hacer y relaciones nuevas por establecer.
A ver qué tal... habrá que trabajar en recuperar este espacio... ojalá me pasen muchas cosas y tenga hartas ganas de contarlas.
Ya estoy de vuelta... I'm back, como Terminator!!!

* En la imagen, un ángel de la oscuridad... aunque no sé a qué anime pertenece.

domingo, julio 19, 2009

UN BREVE RECUENTO


Tenía tanto sin escribir y tan pocas ganas de hacerlo, que ya había olvidado mi contraseña... jajaja
Sin embargo, ahora estoy de humor, y desde la última vez que escribí a la fecha han sucedido muchas cosas súper interesantes (al menos para mí).
El asunto es que después de más de tres años de estar soportando a la persona más nefasta del universo (al menos del mío), renuncié a mi trabajo y la mandé al demonio (para estas fechas ya habrá entendido en su neurótica, estúpida y madirleña cabecita que es insoportable). La verdad es que me siento súper bien. Me quité tres toneladas de estrés de una buena vez y, como dice Oprobio, un alacrán del cuello.
Así, desde hace poco más de dos semanas, mi vida marcha genial; estoy trabajando en la maternidad, cosa que había relegado por la cobertura de la agenda pública y el estar inventando "temas" (una especie de nototototas) que prácticamente a nada llevaban y dudo mucho que significasen algo para los (quizá) pocos lectores de la sección, una sección que desde que esta mujer llegó al poder vino de más a menos y menos y ultra mega menos, rayando en nada.
Me cansé harto y así, de una día para otro, sin pensarlo demasiado, me decidí a renunciar, a pesar de no tener ninguna claridad al frente, más que la certeza de que finalmente haría a un lado a este ser nefasto.
Por eso no tengo trabajo ahora y lo estoy buscando, pero en eso no hay estrés... aunque sé que las cosas no están de lo más fáciles del mundo y que los trabajos no se dan en los árboles, estoy confiada en que algo saldrá... porque ésta vez tomé la mejor decisión del mundo y para nada fue apresurada, pues en realidad desde que empecé a conocer la clase de persona que era ésta (una a la cual, por cierto, en un principio me ocupe de defender ante los otros); alguien verdaderamente malo, que quizá es resultado de la amargura que ha acumulado en sus 40 años de vida y el hecho de que aparentemente en su casa (de la cual habla maravillas) nadie la quiere, porque si la quisieran, creo que en nueve años ya habrían venido a visitar, ¿no?
En fin, que me siento bien... aunque me quedé con las ganas de reventarle el hocico y patearla en el estómago, la espalda, las piernas y su empanizada cara... jajaja
¡Oh por Dios... con solo imaginarlo basta para sentirme genial!
Bueno, pues así las cosas... cuando decidí renunciar, pensé que podría ser un estupendo regalo de cumpleaños no volver a ver a esa basura (aunque sé que en algún momento me la encontraré de nuevo) y así sucedió. El 2 de julio lo pasé en mi casa, con Alexiel y con Luis (un poco crudilla, eso sí... porque el miércoles nos salimos a festejar).
Por ahora, estoy a la caza de un trabajo, pero como soy bien roña (jajaja), quiero algo que no me aleje del todo de esto que me encanta (escribir, cubrir eventos, hacer "temas"... reportear), pero que de ser posible se ajuste a un horario, porque tampoco quiero desprenderme de la maternidad que estoy ejerciendo ahora (aunque Alexiel es un huracán y me deja harto cansada). Ya veremos si sale algo así... confío (insisto) en que así será.
Opciones, de momento hay algunas por ahí... pero todavía falta rascarle un poco más y ver si se me hace eso de dar clases, aunque sea solamente para sacarme esa espinita de mi ser... pero eso, como dijo el ciego, "ya veremos".
Así las cosas con este súper breve recuento de la felicidad de estar haciendo lo que hago ahora.


domingo, mayo 03, 2009

EL CLAN DE LOS ESCÉPTICOS


Yo soy del clan de los escépticos y sinceramente creo que sí deberíamos organizarnos y reunirnos, aunque sea nomás para pitorrearnos de tanto pinche drama que se ha desarrollado en torno a esta supuesta influenza porcina... y después de que nos ríamos como loquitos, podríamos ponernos a llorar, porque parece que las cosas sí se van a poner de la gaver en este país, la verdad poco me importan los otros, pero seguro que aquí estará fatal.

¿Que por qué soy del clan de los escépticos?


Pues porque no encuentro razones para no serlo. No entiendo qué pasa con esta epidemia, hay muchas cosas que, a mi parecer, no encajan... ya ya estoy hasta la madre de esta basura.

lunes, abril 27, 2009

ALERTA ROJA



¡Corran por sus vidas... la influenza nos ataca!


Y entonces, muy al estilo de Exterminio, llegan unos seres tipo zombies bestiales que se empiezan a cargar a los pobres ilusos que no alcanzaron a correr o que simplemente no tienen un cubrebocas... ah, porque contra este terrible virus no hay mejor repelente que un cubrebocas -causa el mismo efecto que la cruz o el agua bendita con el terrible Drácula-, quienes lo traen están completamente a salvo del maldito demonio que quién sabe cómo llegó a esta tierra de paz y armonía.


Pero no se alarmen... cierto es que jamás en la vida se ha muerto gente a causa de ninguna otra enfermedad como ha sucedido con esta cepa, al menos no que yo sepa, ni que el gobierno sepa, ni que las autoridades sanitarias sepan, ni nadie en este bonito país... el hecho es que todo está absolutamente controlado, siempre y cuando se lancen como locos a las farmacias y tiendas de autoservicio a hacerse de sus cubrebocas, esenciales -de verdad esenciales- para conservar sus cuerpecitos... y claro, no saluden de beso, ni de mano; no vayan a lugares donde haya multitudes (chin, y yo que fui esta mañana a una súper rueda de prensa con hartos reporteros) y no se vacunen... NO, NO NO. Pero lo más importante, deveras deveritas, no se alarmen.


La verdad es que me muero de la risa con tanto drama. Y es que parece una película al más puro estilo del Santo contra los "zombis", nomás que lamentablemente no tenemos al Santo de nuestro lado para que nos libere de esta terrible plaga... ni siquiera al Chapulín colorado, ¡caray!


Justo ahora hay un mensaje del secretario de Salud en el ámbito federal (que por cierto habla un buen inglés) y dice que en la mayoría de los estados del país no hay ninguna confirmación de influenza... bueno, yo digo, porque no basta con recomendar a la gente que se cuide, pero sin tirarse al drama de que la súper epidemia nos va a exterminar. Aunque claro, debo decir que eso tiene que ver más con los medios que con las propias autoridades.


En fin, que me da risa, sí; que me parece exagerado y una forma de alarmar a la población; que no creo que eso ayude a la gente a cuidarse; que quizá la cercanía con Estados Unidos nos está dando en la madre... vamos, que yo me pregunto ¿por qué debemos hacer de la nuestra una sociedad del miedo como la de aquellos que habitan hacia el norte?


Chale... este antrax a la mexicana ya me esta cansando.


Aunque, claro que para muchas personas tiene su lado bueno: no hay clases, incluso en estados donde no se han confirmado casos de este tipo.


Bueno, pues que lo gocen los que no tienen nada qué hacer y que por ello, podrán continuar alamándose en sus casas.


Ah... y ¡arriba los cubrebocas que nos salvarán de esta epidemia!

martes, abril 07, 2009

YO VISTO DE NEGRO


De verdad que no entiendo qué le pasa a la gente, digo, si no hay necesidad de quedar bien (ni posibilidad siquiera) para que le vienen a una con mamadas como "¡estás adelgazando mogollón!".

O sea, eso en nada ayudará a mejorar las relaciones interpersonales y no deja de ser una gran mentira.

Justo eso me dijo el otro día una de ésas personas que dicen cosas nomás por decir y en el momento menos apropiado. Yo me pesé el día anterior y me dí cuenta de la ya evidente realidad, estoy algo, un poquitín (harto), pasadilla de mi peso (jajaja, no se oye tan mal, no?), y luego me vienen con que "el otro día que te vi (o te tijeree), me dí cuenta de que estás adelgazando". Claro, eso viene genial cuando una se siente del nabo...pero si no viene a caso, mejor ni decirlo.

En fin, que con ésa gente no se puede y punto!

De cualquier forma yo sigo vistiendo de negro pa'que la realidad no se note tal cual es... muy triste.

lunes, abril 06, 2009

"20 LITROS DE LA VERDE, DOS DE ACEITE DE TRANSMISIÓN..." o "LA FELIZ Y AMENA CHARLA DE 'ME DIJO-LE DIJE'"



La semana pasada fui a la gasolinera y le dije a la despachadora: "20 litros de la verde, dos litros de aceite para la transmisión y una botellita de líquido de frenos".


Me pidió la llave, abrió el tanque, puso la manguera en el "hoyito" y se fue por el aceite de transmisión. Abrí el cofre y dejó las botellas ahí y se fue por lo faltante. Regresó con líquido para... mmm, no sé, para otra cosa que no era lo que le pedí.


"No -le dije-, era de frenos".


"Perdón, pensé que me habías dicho...", y se fue por el correcto.


"Pues en qué estás pensando, mi chava", le dije, pero así nomás, sin ninguna intención.


"Es que fíjate que mi hijo de 18 años -me dijo- se peleó con mi cuñado... él cumplió 38 años en septiembre del año pasado".


Me quedé en shock. Chale, la doña quería platicar y pues ni modo, se me da eso de que me platiquen cosas.


"Le ganó mi hijo. Lo que pasa es que yo estoy separada de mi esposo desde hace 12 años y desde hace cinco somos pareja, y mi cuñado nunca se cuida de donde habla, y el otro día estaba en la tienda de por la casa y estaba hablando, casi gritando, cosas de mi y la novia de mi hijo lo escuchó. Entonces le dijo a mi hijo: 'tu tío está diciendo esto y esto de tu mamá'. Mi hijo se enojó mucho y me dijo, y yo le dije a mi cuñada que le dijera a su hermano que no estuviera diciendo cosas o que al menos se cuidara de dónde las dice".


"Claro", dije.


"Entonces mi cuñado, que estaba ahí, empezó a decirme de cosas y llegó mi hijo y le dijo que no estuviera diciendo cosas de mi y que me pidiera una disculpa, pero mi cuñado es bien hocicón, entonces retó a mi hijo y mi hijo le dijo 'órale'. Se quitó el reloj (el cuñado) y se los dio a un achichincle que anda siempre con él, y le dijo a mi hijo 'orita nomás te voy a dar dos putazos'; entonces lo retó y mi hijo le entró".


Me contó que el cuñado lo jalaba para que se partieran la madre en la calle, a plena avenida, como queriendo mostrar a todos que le iba a dar en toda la torre, pero su hijo lo jalaba hacia la banqueta. El caso es que ahí, en la calle, se empezaron a agarrar a moquetazos...


"Y en una de ésas, el achichincle le brincó a mi hijo a la espalda y lo agarró para que su tío (el del chavo) le pegara por adelante. Pero ahí estaba mi otro hijo, que es más grande, y lo agarró (al achichincle) y le dijo 'déjalos hijo de la chingada', y entonces su esposa (la del cuñado) también se quiso meter y yo la agarré: 'espérate cabrona' (le dijo)".


Al final, el hijo le dio en toda la "moder" al tío, "y ya mi suegra ni me habla".


Y entonces vino el examen: "Pero a ver, ¿quién tendría que defenderme?", me preguntó. "Pues... (moví la cabeza)...". "Claro, ¡mi pareja!", exclamó.


Como ya estaba tan compenetrada con la conversación, le pregunté si él estaba enterado del pleito callejero. "Claro que sabe, nomás que se hace pendejo. Pero mira, yo le voy a decir 'oye, qué onda... porque aquí tú debiste defenderme' y lo voy a mandar a la fregada".


"Claro -le dije otra vez-, porque si no lo ha hecho (defenderla) eso quiere decir que lo único que le importa es...".


"Sí... y pues así no, mejor que se vaya", dijo, cerró el cofre de la camioneta, me dio mis llaves y pagué.


"¿Ya ves por qué ando distraída?", me dijo.


"Sí, y con toda razón", le dije y nos despedimos.


¡¡¡Qué buen chal!!!




miércoles, enero 21, 2009

LA FELICIDAD EN UNAS BOTAS


La semana pasada, al llegar a mi casa y despojarme de mi ropa para echarme a descansar, sucedió la más terrible tragedia de la historia en la vida de Aimeé (o sea la mía): mis botas -ésas que me han acompañado a lo largo de tres años y medio, testigo fiel mi caminar de un evento a otro, coprotagonistas de momentos maravillosos y otros verdaderamente fatales- se murieron. No fue como la otra vez en que se desprendió una parte de la suela (al llegar muy feliz y contenta a cubrir una rueda de prensa de Papirolas, allá en la lejanía de la Calle 2), pues aquello tenía una solución pronta... No, ésta vez no era otra cosa que la muerte: se descosieron para siempre, dejándome -casi- en un mar de lágrimas. Hasta me vi en la necesidad de mandarle un mensaje a Lalo gritando -por escrito- la pena que embargaba mi corazón.
Ante tal pérdida, me vi en la necesidad de usar de nueva cuenta alguno de los múltiples pares de botas negras que hay en mi clóset. El jueves me pusé unas que compré cuando estaba en Mural, hace mucho mucho tiempo. Recuerdo que Liliana también las había visto y decidimos dejar a la suerte quién tendría la posibilidad de hacerse de ese par antes que la otra. Me acuerdo lo feliz que me hacían en aquel momento esas botas, pero ahora no... estaba acostumbrada a la comodidad infinita de mis botas darketonas.
El viernes decidí ponerme unos tenis. También de esos zapatos que estaban en la oscuridad del armario. Lalo me dijo que no volviera a usarlos porque estaban deprimentes, pero en realidad estaba yo tan triste sin mis botas, que no noté que los tenis efectivamente estaban fatales.
El sábado me encontré otro par de botas, unas que mi mamá me prestó cuando estaba embarazada pensando que podría usar con mi pata de elefante. No me sirvieron entonces, pero esta vez las utilicé, aunque un poco a disgusto, pues no me sentía yo misma.
Y es que en verdad es impresionante cómo un "algo", como unas botas, pueden convertirse en un elemento básico de la identidad de una persona. Ásí son mis botas. Con ellas no tengo que decir quién soy, porque ellas hablan por mi. Con ellas me siento yo y sin ellas, quién sabe en quién carajos me convierto.
El martes pasé a una zapatería y me hice de un par de botines de la marca "Establo" (¡Uh!), obviamente no satisfacían del todo mi necesidad identitaria, pero al menos sirvieron para sentirme un poco más yo.
Hoy por la mañana, cerca de las diez, le envié un mensaje a Lalo para que me acompañara a buscar mi identidad. Quedamos de vernos en el periódico después de las 12:30. Al final, me fui a San Yoni con Ricardo y Lalo cayó allá para acompañarnos en la ardua búsqueda de mi objeto identitario.
Pasamos por tres changarritos, en uno de ellos encontré unas botillas que me hacían feliz. Después volvimos al primer sitio que encontramos y vi otras, con cierre y agujetas que me hacían más o menos feliz.
Al final me decidí por ésas y puedo decir con absoluta certeza que justo en este momento soy la mujer más feliz del mundo. Por supuesto que al llegar de vuelta al periódico me quité las que había comprado ayer para usar estas hermosas prendas.
Es impresionante lo bien que se ven cubriendo mis pies. Son las botas más maravillosas del mundo. Ya me siento lista para andar otros tantos años teniéndolas como compañeras fieles. Y lo más importante... ya me siento yo otra vez; he vuelto a la luz después de estar perdida durante una semana en tierra de nadie.



* ¡¡¡Mis botas son lo máximo!!!

jueves, noviembre 13, 2008

OTRA VEZ EN MIÉRCOLES


Hubo una etapa en que salía con Liliana y sus compañeros del periódico (en ese entonces yo estaba en prensa de la UdeG) prácticamente toda la semana; descansábamos los domingos. Cada día era un sitio distinto, llámese baresillo o restaurasillo o cafeterisilla (jajaja), el hecho es que siemprer había un sitio a donde caerle para tomar un par de chelas (o quizá dos pares o tres).

Después, el ritual se hizo los jueves y luego, cuando Mariana cruzó el charco, Liliana y yo comenzamos a salir los miércoles, acompañadas ocasionalmente por Norma y Karla.


El hecho es que desde hace unas cuantas semanas he comenzado a salir nuevamente en miércoles. Ahora ya no somos solamente dos personas (Liliana y yo), sino cuatro: Rebeca (Público), Ricardo (La Jornada), Lalo y yo (Informer).


La primera vez nos fuimos al baresillo del Hotel del Parque, pues un día que pasaba por ahí (me tomé una cerveza con J.Lo, de Mural, cosa que Rebeca no me ha perdonado aún) me dí cuenta de que las chels estaban a 10 pesitos. Así que después me di a la tarea de sugerir a los antes mencionados, que debíamos ir a degustar una poca de esa espumosa bebida.


Así fue... fuimos, y disfrutamos enormemente de esa oferta. Además, nos alcanzó el dinero para comprarnos unas papas bien chidas. A la semana siguiente regresamos al lugar, igual, disfrutando de gastar poco y tomar harto, aunque no se caracterizan por tener buena música.


En un afán por darle variedá a la fiesta, al siguiente miércoles nos fuimos al Californias (a 12 pesitos la chela), de ahí nos pasamos a La Santa a cruzarnos felices y contentos con los martinis (hasta Lalo salió hasta las chanclas de ahí, y eso que él no toma, pero como están tan suavesillos y riquillos los martinis, pos da la impresión de que uno se está tomando un inocente juguito).


Ya para la otra semana decidimos cambiar nuevamente de ambiente y nos fuimos al Coyote Rojo, un bar que está justo frente al Expiatorio (a un lado de donde vivía cierto astrólogo), donde dan hartas palomitas, buena música y videos, y la León está a 15 pesos, pero con el inconveniente de que cierran a las 12. Me parece que ahí fuimos dos veces más, la última ocasión fuimos a seguirla a casa de Rebeca.


Además, en un par de mini-ocasiones nos acompañó al Coyote el joven y ameno Alejandro (Mural).

La semana pasada el "tour" nos llevó al bar Xentro, en la esquina de 8 de julio y Piter Brunet. Cuando descubrimos que la Indio costaba 15 pesotes, decidimos cambiar de sede, a un bar sobre 8 de julio, entre Piter y Juárez, donde leíe en un cartel que la cubeta estaba a 120 pesos. Pedimos Victoria. Ahí nos acompañó Marcela (Mural), sin duda una divertida compañera de farra.


Ayer cambiamos nuevamente la sede, nos fuimos a una linda cantinita-bar, El Morelias, en Epigmenio ¿González?, a media cuadra (creo) de 8 de Julio. Esta vez no nos acompañron ni Marcela, ni Alejandro... e incluso la Rebequilla llegó a las mil, pero lo pasamos bien... como todos los miércoles lo hacemos.

sábado, octubre 25, 2008

DIMENSIONES PARALELAS


Alguna vez Ricardo Duarte nos llamó "Las chicas superpoderosas", creo que fue porque éramos tres y siempre estábamos juntas... además, a las tres nos caía mal "Mojo-jojo".

Supongo que en algún capítulo Bombón, Bellota y Burbuja se habrán separado. No sé... quizá Burbuja se fue a otro país a estudiar una maestría en dibujo con crayones; y tal vez después a Bombón le dio por irse a salvar a otra ciudad. A lo mejor Bellota se quedó en casa, para seguir en lo que estaba... extrañando a sus hermanas, como extraño yo a mis amigas.

El otro día, en la madrugada (a las 4 de la mañana), sonó el celular y era Liliana. ¡Qué cerca y qué lejos estamos!

A veces me da la impresión de que vivimos en dimensiones paralelas... y es que mientras sigo con lo que me ha tocado vivir ahora, me encuentro de vez en cuando con Liliana (Bombón) y Mariana (Burbuja) acompañándome en mis recuerdos.

Quizá algún día nuestras dimensiones se unirán de nuevo... ¿verdad?

miércoles, agosto 20, 2008

NOSTALGIA


Ahora que me ha dado por subir hartas fotos al Feisbuk, me he puesto un poco nostálgica al encontrarme con ésa que ya no soy ahora. Para empezar ya ni me veo tan joven como antes, simplemente porque ya no lo soy (aunque creo que en el fondo no he perdido mi encanto... jajaja); y por otra parte, ya no tengo ni por asomo el aguante fiestero que tenía antes.
¡Qué esperanzas que en estos tiempos pueda irme de farra a La Santa, la Mutua, el Calavera, el Prana, el Angels, el Mónicas o el Circus y de ahí pasarme feliz de la vida al Lido, para terminar la jornada festiva en el depa de alguna de mis amigas! No... simplemente imposible.
Sin embargo, me emociona el recuerdo de esas arduas jornadas que iniciaban justo al salir de mi trabajo, teniendo como punto de reunión el departamento de Mariana en Niños Héroes o en Morelos... pero al mismo me pone un poco triste.
La verdad extraño mucho aquellos tiempos. Claro que disfruto enormidades lo que tengo ahora (Luis y Alexiel y mis compañeritos de chamba), pero hay tantas anécdotas en el disco duro de mi memoria y en uno que otro archivero de mis adentros, que quisiera repetir por lo menos una vez más... que si las micheladas de litro, las visitas veloces al Américas (plagado de calientes feos y uno que otro guapillo), los jueves en el Lima y el Calavera, los miércoles de martinis, la prolongación festiva en el A dónde, las noches de canciones de Marisela, Belanova y el Bisbal que nos teníamos que fletar como cortesía de Mariana, el caldito de pescado de Chuy en La Mutua, el choquesillo en el seven-eleven que nos auspició unas cervezas, las piedras rompe vidrios, los encuentros con Sergio, las "donitas" en casa de Liliana y miles y millones de cosas más por contar.
Por lo pronto me conformo echando un vistazo a las fotos que cuelga Mariana en el Fesibuk, también del recuerdo, y las que ya he puesto yo.
En unos días más vendrá Pollo, tengo hartas ganas de verla y de pasada echar un vistazo al cajón de los recuerdos. Ojalá estuviera también aquí, manque sea de pasada, el otro Pollo.
Es increíble que después de haber compartido tantas y tantas historias a lado de Mariana y Liliana, hoy ninguna de las dos esté siquiera un poquitín cerca.

viernes, agosto 08, 2008

VACACIONES

Cuando era niña, mis papás nos llevaban con bastante frecuencia al mar. Desde la casa me ponía mi traje de baño para estar lista al llegar al hotel y correr hacia la alberca, y como era tal mi ilusión de llegar a echarme un chapuzón, me la pasaba las horas del mundo preguntando en el coche: "¿ya mero llegamos?" y ante las respuestas de no, me daba por ponerme a contar las casas que había a nuestro paso planeando que en una de ellas podría vivir "Caperucita Roja", en otra "El Lobo" y en la más lejana "La Abuelita"... jajaja.
Además de la alberca, mi papá me prometía llevarme a caminar por las mañanas a orillas del mar. Me gustaba sentir la arena en mis pies y el agua, que iba y venía una y otra vez para refrescarme. Por la mañana, me despertaba tempranito para que mi papá me llevará a ese paseo, sin importar que él estaba de vacaciones y quería descansar un poco más... a fin de cuentas, él lo había prometido y de esa forma, no había marcha atrás.
Siendo más grande el mar dejó de encantarme... sigo disfrutando de la alberca y el mar, como cuando era niña, pero el calor me parece insoportable. Ahora si voy a la playa, deseo pasar la mayor parte del tiempo en la habitación, protegida por el aire acondicionado.
Sin embargo, a pesar de eso, recuerdo con gusto aquellos viajes y tengo un sabor de boca súper agradable... por esa razón quise que Alexiel conociera el mar; durante días lo imaginé jugando en la arena y disfrutando del ir y venir del agua. Eso fue lo que me motivó a buscar hotel y desear mis vacaciones para llevar al hijo a ese paseo playero.
Fue hasta que sentí el maldito calor húmedo del mar y las gotas de sudor deslizarse por mi cara, cuando caí en la cuenta de lo desagradable que me resultan esos rumbos hoy en día; pero al ver a Alexiel disfrutar tanto del mar, sin asustarse siquiera un poquitínm, me hizo ver que valía la pena pasarlo un poco mal por el insufrible calor, siempre y cuando el hijolín disfrutase el paseo.
A continuación, algunos de esos fragmentos que pudimos capturar para guardar toda una etnernidad...


* Los tres en una caseta...



* Alexiel en la arena...













* Alexiel y el mar...

lunes, julio 21, 2008

LO INSUPERABLE



Cuando Daniela estaba pequeña su mamá, Paty, la dejaba con frecuencia en casa para que la cuidáramos. Durante mucho tiempo pensé que yo también era responsable de cuidarla, pero creo que hasta hace poco tiempo he caído en la cuenta de que era mi hermana, Vanessa, la que se hacía cargo de ella e incluso de mi, porque ahora entiendo que yo, a mis quizá 11 años, no era para nada capaz de hacerma cargo de una niña de un año o tal vez un poco más.

El hecho es que en aquél entonces yo pensé que le ayudaba a Vanessa y cuando era la hora de cambiar el pañal de Dany, yo me acercaba con toda la buena intención de ayudar, aunque al final acaba echándome hacia atrás a punto de vomitar, muerta del asco, independientemente de que eso oliera mal o no.

Varios años después, con Rodrigo (mi sobrino), pensé que podría superar aquel asco terrible y alguna vez quise ayudar en el cambio del pañal, pero mi reacción fue la misma.

No sólo era esa situación la que me hacía correr al baño para retorcerme del asco, tambén me acuerdo de un día que Rodrigo por equis razón vomitó y sus papás y abuelos acudieron en su ayuda, yo estaba por ahí y en lugar de cooperar, me dieron ganas de vomitar también, así que mis papás -alias los abuelos- dejaron a mi sobrino para atender a la pobre niña (ya ni tan niña) que se retorcía a lado del que sí era un niño.

Cuando llegó Alexiel a mi vida pensé que por arte de magia mi terrible asco desaparecería... pero no fue así.

Todavía me convulsiono cuando es momento de cambiar el pañal y entre un "perdóname hijo", un "de verdad te amo" y otros varios-muchos "Guag, dag, uagggg", pongo manos en la obra para quitar al pobre niño toda la mierda (literalmente) que sale de su ser y, a veces, se embarra, en gran parte de su tierna piel.

Ahora entiendo que definitivamente eso es algo que no podré superar jamás. En verdad es el momento que más odio cuando estamos solos, porque cuando está Luis con nosotros me hace el paro y se encarga de tan penosa situación.

Aunque para penas, la que pasé un día con el pediatra, pues justo cuando llegó al consultorio yo estaba a punto de cambiarle a Alexiel el pañal, pero me fue imposible... comencé a retorcerme del asco, como ya es costumbre, así que él -tan lindo como es el doctor Pedro Galindo, un tipazo-, me dijo que no me preocupara, que él se hacía cargo, y así fue... él hizo los honores, mientras yo di la espalda a tan asquerosa situación, al tiempo que le decía al doctor: "perdón, normalmente lo hago aguántandome, pero hoy... aaagggg... perdón, perdón".

¡Chale! ¡Qué vergüenza!



* La foto muestra tan sólo un poco de lo que significa para mi ese momento horrible.

miércoles, julio 16, 2008

PARA VER TEATRO


Me gustaba ir al teatro y encontrarme a Héctor Caro, uno de los mejores actores que -en mi opinión- ha habido en Guadalajara.

Al salir, le preguntaba qué le había parecido el trabajo y a partir de ahí comenzábamos a platicar largo y tendido de lo que había sucedido en escena, las entradas y salidas de los actores, el ritmo, la proyección de la voz, la iluminación, la dirección, el sentido de la obra...

Escucharlo provocaba en mi mente una repetición en cámara lenta de las imágenes que antes había visto, con algunos acercamientos a detalles que quizá no había notado y él me hacía ver con más claridad.

Hoy recuerdo esas charlas y cada vez que veo una obra, trato de verla a través de los ojos de Héctor.

Anoche fui a ver una obra, con principios de una gripe espantosa que me ha tenido en pésimo "mood", pero al salir no pude definir en mi cabeza si había sido un buen trabajo o no. Pienso que quizá no lo vi bien, pues no estaba en mis cinco sentidos (el de la vista se nublaba con el acumulamiento de mocos en el del olfato). Y la verdad es que me hubiera gustado encontrarme a Héctor Caro para que me diera su opinión y charlar un poquitín en torno al asunto. Aunque había otros teatristas con los que puedo entablar una charla bastante rica, como es el caso de Eduardo Villalpando, la verdad es que no es lo mismo.

Extraño a Héctor y ni siquiera sé en qué parte del mundo está o en qué circunstancia o qué.

Tengo muchos recuerdos de ese gran actor, que me encantó en su papel de Divino Pastor Góngora y muchos otros más, pero sobre todo esas charlas ricas no solo de teatro, sino de un chorro de temas, incluso trivialidades...

Sí, para ver mejor el teatro me hace falta Héctor Caro. ¿Dónde estás que no te veo?

* Lamento poner esta foto... es malísima, pero la única que encontré de Héctor y justamente en la que hace el papel de Divino Pastor Góngora, bajo la dirección de Javier Serrano.

martes, julio 15, 2008

LO QUE SE SIENTE BIEN


Aunque éste es un trabajo maravilloso, pues cada día es distinto del otro (al menos en lo que se refiere a la producción), pocas veces una se siente como la reina de la información.

Hace mucho tiempo que no conseguía una buena nota, y la de hoy creo que lo fue, porque el resto de los reporteros se había olvidado del tema. y a pesar de que estoy 90 por ciento convencida de que hubo alguien que se colgó de MI nota (publicada estúpidamemte antes de tiempo en la página de internet), sé que fui yo quien la sacó y la verdad es que eso se siente MUY BIEN...


* La foto es un homenaje a Batman que ya está por estrenarse por estos lares y, al mismo tiempo, es la única imagen feliz que encontré en mi archivo.

sábado, julio 05, 2008

EVOCACIONES



Anoche fuimos al cine a ver Hellboy, the golden army a una plaza a la que no acostumbramos ir (Galerías, no la soporto... no me gusta la gente que uno puede ver ahí... guiu!), pero es que Laloprobio nos regaló un pase doble para ir a la premier de la pelí y aunque no me gustan esas ondas, porque se aperra y la gente nomás va a tirar "glamur" y "belleza", fuimos porque la neta sí tenía ganas de ver la películilla, pues el miércoles que fue mi cumple Luis y yo pensamos que si estuviera en cartelera sería chido verla. No estaba y todavía no está, pero ya la vimos y con todo y el glam -y la fila inmensa para entrar- lo pasamos bien, pues afortunadamente al entrar a la sala (la 11) Vanesa García Leyva me echo un grito y pasamos a depositarlas en un par de asientos que estaban libres junto a ella y Antonio Marts.

Ricardo (Solís) ya me había contado en breve de qué iba la película, pues a mi no me pasaba por mi cabecita ninguna posible trama, como sucedía con Luis (que ya está más entrado en esas ondas) y ya tenía en su cabecilla una ligera imagen de lo que podríamos encontrar en la pantalla.

Debo decir que me gustó mucho la película, aunque creo que es 100 por ciento dominguera, pues básicamente es entretrenida, no tiene nada de profundo o misterioso, aunque hay escenas encantadoras.

Encontré muchas referencias en las imágenes, algunas me recordaron a películas que vi hace años y otras mucho más recientes. Así, en mi mente, al ver las escenas poco a poc se iban dibujando recuerdos e incluso sensaciones.

El ejército me recordó mucho a los guardias que tenían en El cristal encantado (película de 1982 que en inglés se llamó The dark crystal) los Skeksees para atrapar a otras criaturas, especialmente a los goblins, para tomar su esencia; aunque su poder para reconstruirse es igualito que el de El gigante de hierro, cinta animada de 1999 que narra una historia de amistad entre un niño y un enorme gigante venido a la Tierra desde un lejano planeta.

El meollo de asunto, lo de la creación del ejército, tiene mucho qué ver con El señor de los anillos; de hecho la primera parte de la cinta me parece casi una réplica de esa película que me hizo tan feliz y vi en Cinemark con Liliana y Eugenio.

Los nombres de algunos de los personajes: Balor, Nuala y Nuanda, me recuerdan a la mitología celta... quizá sea porque justo de ahi provienen... jijiji. Mientras que la apariencia de Nuanda, me hace pensar en alguno de los vocalistas de esos grupos que le gustan a Laloprobio y que se visten de faldas (o batas) largas, la cara pintada de blanco y el cabello largo. (Mmm... no se me ocurre ningún nombre por ahora).

El hombre de piedra me hace pensar en otro hombre de piedra que sale en Excalibur, una película de 1981 que dura mil horas y me da la impresión que en realidad fue hecha para televisión.

De momento no se me ocurre más, pero estoy segura de que la cinta trajo a mi mente más imágenes, más recuerdos y más placer... ya veré si recuerdo algo más para contar. Por ahora no, así que hasta aqui llegó mi inspiración.

viernes, julio 04, 2008

OTRO MÁS

El año pasado celebré mi cumpleaños com Alexiel en brazos, justo ése día lo llevamos a registrar, después de poco más de una semana de la "desalienización" de la que fue objeto.
Pero este año, celebré mis 34 veranos de forma distinta e incluso, cosa curiosa, siento que la fiesta sigue, así que digamos que estoy como de "Jubileo".
El hecho es que el martes comenzamos con el pre-cumpleaños en el Scratch. Estuvo genial, no fue planeado, sino que nomás salió. Sin pasarme como lo hacía antes, nos quedamos hasta la una de la mañana, me tomé seis cervezas y compartí un momento súper chido con mis compix (Ale, Oprobio, Karelia, Monte, Jairo, Sairi, Minerva, Ricardo y Raúl).
Fue raro estar ahí, pues antes Liliana y yo nos echábamos unas largas veladas en ese mismo lugar... bueno, ahí empezábamos y después comenzaba la gira, tal vez hacia el Prana o al depa de alguna de las dos. Y aunque a veces extraño aquellos momentos, la verdad es que lo pasé genial, porque esta vida que tengo ahora me hace muy, pero muy feliz.
El miércoles no trabajé, me dediqué a dsfrutar el día con Luis y un poquitín con Alexiel, pues a él lo depositamos con mi suegra y luego nos fuimos felices y contentos a hacer cosas solitos.
Luis me regaló un dvd de Covenant (In transit) y una blusa linda linda; mis padres un mp3 que se cuelga en el cuello y mi suegra y mi cuñada, unos perjúmenes y una bolsilla para guardar cosillas. Hace mucho tiempo que no recibía tantos regalos, eso estuvo chido también.
Por la noche fuimos un rato a casa de mis papás y luego con mis suegros por hijolín.
La celebración continuó el jueves (el post-cumpleaños) con pastel en el trabajo, mi favorito, de chocolate con nieve de vainilla. Me lo llevé a casa.
Y esta noche voy a ir a ver Hellboy, Lalo (alias Oprobio) acaba de regalarme un pase doble que me ha hecho muy feliz, pues a Luis le encanta esa pelí... ya veremos al rato qué trul y cómo sigue la celebración cumpleañera.


* Me hubiera gustado meter un video de "youtube" adecuado para la ocasión (Happy fucking birthday, de Combichrist), pero no sé cómo demonios se suben los videos, así que si alguien me puede instruir, le estaré muy agradecida.

domingo, junio 22, 2008

EL PRIMER AÑO DEL RESTO DE NUESTRAS VIDAS



En 1985 salió la película St. Elmo's Fire, en el español se le dio el título de El primer año del resto de nuestras vidas, porque era mucho más acorde y fácil de entender -supongo-, pues la cinta narra la historia de vida de siete amigos de la universidad en su primer año después de haber egresado.
Yo no la vi en el cine cuando se estrenó, era muy joven y no se me permitía el acceso a la sala cinematográfica. La vi años después, cuando salió en video. La rentamos en un Videocentro que estaba por la casa, en avenida Miguel Ángel, en La Estancia; entonces todavía existían los cassettes Betamax, de hecho, eran "lo de hoy"... ahora solamente son un recuerdo para gente como yo y más grande que yo.
Ésa película me gustaba mucho, salían -a mi gusto- algunos muchachos de buen ver (a excepción de Emilio Estevez) y las historias de cada uno de los personajes me resultaban bastante interesantes... Alguna vez pensé que yo podría ser uno de los personajes "cuando fuera grande", jajaja.
El hecho, es que Luis, Alexiel y yo, acabamos de concluir "el primer año del resto de nuestras vidas".
Justo hace un año, estábamos Luis y yo en hospital con nuestro hijo... me recuerdo acostada sobre la cama mirando un ventilador de techo que me recordaba muchísimo a Patricio, el amigo de Bob Esponja; a un lado de mi estaba Luis con Alexiel en brazos y mil de gente alrededor.
Este primer año ha estado lleno de todo: de angustia cuando no entendía por qué lloraba; de emoción, cuando empezó a sostener el biberón con sus manos; de alegría, cuando se sentaba solo; de tristeza, cuando veía que se quedaba encantado de la vida en guardería mientras yo me iba; de preocupaciones, cuando se enferma; de gusto, de verlo gatear tan feliz y contento por aquí y por allá; de enojos, cuando le llega la hora del drama y no hay forma de hacerlo callar... de una felicidad infinita, por tenerlo conmigo y escucharlo decir "papá" o "mamá" o "aba".
Alexiel nos ha hecho muy felices a Luis y a mí; a mis papás y a mis suegros; a mi hermana y a mis cuñados; a la familia entera, porque de verdad que ya hacía falta un bebé en nuestras vidas.
Su primer año lo celebramos todos los días, pero hoy hicimos una pequeña reunión en torno a él, con pastel y gelatina, aunque él no haya comido nada de eso.
La verdad es que éste, "el primer año del resto de nuestras vidas", ha sido un ciclo fabuloso y vienen muchos más y eso me llena de emoción.
¡Feliz Cumpleaños Alexiel!